
La ambientación en la Edad Media, es buena, lo que visten,
lo que comen, cómo se trasladan de un lugar a otro, la vida en los castillos,
las mazmorras…
Los hombres, defendiendo sus posesiones, por supuesto las
mujeres forman parte de ellas, por lo que pueden hacer lo que quieran con
ellas.
Pero no estamos ante una historia normal de romanticismo en
el Edad Media, porque también hay hadas y dragones, figuras mitológicas y
bichos horribles, todo descrito con naturalidad, tejiendo realidad y fantasía
de manera que sean solo una.
La historia de amor entre el duque y la duquesa, bonita,
nada empalagosa, con un par de escenas eróticas contando lo justo. Son una
bonita pareja que se hacen querer desde las primeras páginas, cuando solo el
lector sabe que se van a enamorar.
El personaje de Nasser, ese secundario de lujo que merece
una historia para él solo. Una infancia difícil, poca suerte en el amor y la
lealtad por encima de todo.
Toda la historia gira en torno a las segundas oportunidades.
¿Qué haríamos si nos diesen la oportunidad de volver a vivir sabiendo lo que
nos ocurrirá? La autora ha hilado una historia compleja, llena de fantasía, con
toques de humor.
¿Qué es lo que ha fallado? En mi opinión es demasiado larga,
hay algunas subtramas en las que se extiende demasiado, aunque insisto, el
resultado final es de haber leído una bonita historia.
Anne K. Austen es el seudónimo de una autora española. Buscad en las redes sociales y averiguaréis quién está detrás.