lunes, 29 de abril de 2019

DUMBO: La película


Pues a mí me ha gustado.

Hace mucho que no me fío demasiado de las críticas especializadas, que no siempre coinciden con mi percepción de las películas.

Dumbo ha llegado con mucha expectación y malas críticas. Que no ha superado su antecesora de dibujos, que será fácilmente olvidable…

Después de lo que me ocurrió con El regreso  de Mary Poppins, que la vi con el recuerdo de la primera y no fui capaz de disfrutar de la película, esta he ido a verla sin tener en cuenta ni la historia, sabía que era diferente, ni el recuerdo de la película de 1941.

La acción transcurre en 1919 y la ambientación es magnífica. Muy sobresaliente la actuación de Dani DeVito, los demás, simplemente correctos, a excepción de Michael Keaton que me parece que está exagerado en exceso.

La historia, con muchas moralinas que los más pequeños no entienden, pero que están ahí: la familia, la camaradería, la amistad, el engaño, la avaricia, el maltrato animal y un guiño a los animales en libertad. También nos invita a reflexionar sobre los grandes parques temáticos y el «todo vale» con tal de llenar las arcas de los de siempre.

Dice Carlos Boyero que Tim Burton se ha limitado a rodar con profesionalidad un guión ajeno, pero el resultado es muy agradable, la verdad.

Y luego está Dumbo. Esa joya de la digitalización, con sus enormes orejas y, lo mejor de la película, los tiernos ojos del elefantito que te hacen sonreír.

En lo que sí coincido con los críticos es que no llega a ser entrañable, si yo no lloro, mala señal, aunque un pequeño nudo en la garganta, sí se me hizo.

En resumen, no será una obra maestra, pero merece la pena verla y disfrutarla, en una sala de cine.

sábado, 27 de abril de 2019

Todos los veranos del mundo: Mi opinión


Sinopsis:

Helena no sabe cómo sobreviven las familias cuando coinciden todos sus miembros bajo el mismo techo, pero está a punto de averiguarlo.
Helena, decidida a casarse en Serralles, el pueblo de todos sus veranos de infancia, regresa a la casa de sus padres para preparar la boda y reencontrarse con sus hermanos y sobrinos. Un lugar sin sorpresas, hasta que Helena tropieza con Marc, un buen amigo al que había perdido de vista durante muchos años, y la vida en el pueblo deja de ser tranquila.
Quizás sea el momento de refugiarse en la nueva librería con un té y galletas, o acostumbrarse a los excéntricos alumnos de su madre y a las terribles ausencias. Quizá sea tiempo de respuestas, de cambios y vendimia. Tiempo de dejar atrás todo lastre y aprender al fin a salir volando.

Mi opinión:

Leer a Mónica Gutiérrez es para mí un valor seguro. Sé de antemano que disfrutaré con su lectura. Es una maestra en el tipo de novela llamada feel good, aunque esta me ha parecido diferente a las anteriores.
Como siempre, sus descripciones, tanto de lugares como de personas, hacen que nos metamos dentro de la historia como un personaje más, disfrutemos, riamos y, si hace falta, lloremos.
El pueblo en el que Helena ha vivido los veranos de su infancia, en el que todos se conocen y que me ha traído recuerdos que tenía casi olvidados de unos cuantos veranos que pasé en los alrededores del Pantano del Burguillo, en lo que hoy llamaríamos un hotel rural (ese término hace más de cincuenta años no existía). Por cierto, es la primera novela que leo de esta autora que esté ambientada en España y en verano.

Me ha gustado especialmente la relación con su madre. No todas las madres muestran abiertamente sus sentimientos, otras los callan, pero eso no quiere decir que no quieran a sus hijos, que no sufran por ellos o que no añoren a su compañero de vida, cada minuto.
Las conversaciones con sus hermanos, su hermano mayor y su hermana pequeña, tan necesarias. No siempre es suficiente saber que están ahí para cuando los necesitemos o nos necesiten, hay que demostrarlo, acercarnos, intercambiar confidencias, sentimientos…
No podía faltar su toque inglés con una librería un tanto extraña, que no vende novedades, sino libros especiales y en la que se puede uno tomar un riquísimo té con pastas en compañía del excéntrico propietario.

Me he encariñado con los personajes secundarios, siempre tan importantes en las novelas de Mónica Gutiérrez, cercanos y entrañables, casi todos.
Los paisajes, ese rio en el que he metido mis pies descalzos y he podido sentir el agua helada de los arroyos cercanos a Los Pirineos, ese césped que he pisado, mullido y fresco, los olores, el columpio con el frío de la noche, el té caliente con una nube de leche, la amistad, la importancia de la familia, la solidaridad…me he sentido bien.
Y luego está Marc y su sonrisa.

¿Previsible? Puede que sí, pero da igual. Es una lectura tan agradable, tan bien escrita, tan bonita, que da lo mismo que intuyas lo que va a ocurrir. Merece la pena leer cada una de sus páginas.

Reseña original publicada en el blog de la Revista Pasar Página

Todas contamos: Mi opinión



A Ti, mujer Orgullosa, eres Divina, Amable y Sabia. Cuenta conmigo en los días Oscuros. No estás sola. Tienes una mano amiga, nos tienes A todas nosotras. Mece el sueño y niega lo malo; Olvida el daño. Sana el cuerpo…, te queremos.

Hola, tengo algo que contar(te), en nombre de muchas, en nombre de todas, en nombre de ellas.
No soy Begoña, no soy Patricia, ni Eilen, ni Nala… ni siquiera recuerdo mi nombre.
Soy todas ellas..., no soy ninguna.
Este es un baile de letras de colores y sueños rotos, de palabras bajo la piel que se gritaron con dolor, de días grises donde la lluvia paliaba el miedo, de cartas a la mujer que llora y se recompone, de amores de instituto truncados a golpe de odio, de ropas que deben tapar el cuerpo alegre y vivo, de voces calladas durante siglos de historia, de igualdades que son reales entre las personas, de fotografiar sonrisas, de sacrificios de vidas y trabajos que son la rueca que mueve el mundo, de vientres vacíos y mares de esperanza.
Esto no es un libro de relatos terminado, es la voz de las mujeres que no contaron, que no existieron, que silenciaron.
El final lo escribes tú.
De ti depende que el título se convierta en realidad.
Todas contamos.


Poemas de Peque Zurita
Mis alas de Analí Sangar 
Deja que hablen de Marisa Sicilia 
Cartas al señor Smith de Elena Garquin 
Un par de alianzas de Kris L. Jordán 
La niña de las peinetas de María Montesinos 
Nido de arañas de Silvia Sancho 
Cómo acabar con el amor de Diana López Varela 
Querida Sara de May Boeken
Ni un minuto más de Mercedes Alonso 
Mar de esperanza de Inma Cerezo 

La portada y las ilustraciones interiores (cada relato va acompañado de su propia imagen) son obra de Paloma Martínez (@lareinasincastillo en Instagram) y son como la propia antología: alegre, vitalista y muy combativa.

Mi opinión:

Comprar un libro de relatos benéfico no siempre es sinónimo de que vayamos a leerlo. Es una buena acción que nos hace sentirnos bien.
Si el libro está firmado en uno de los relatos por una amiga como Marisa Sicilia, que escribe tan bien, vamos a leer su relato con toda seguridad y los otros, ya veremos.
A esta Antología le he dado la oportunidad en el aburrimiento que me suponen los parques infantiles y al que he tenido que acudir con mis nietas las pasadas vacaciones de Semana Santa. Abrí el libro en mi teléfono y comencé a leer Mis alas. Me impactó tanto que continué, uno tras otros, hasta la última página.
Encontraremos en este libro buenísima literatura, con contenidos duros, porque el maltrato a la mujer no es un tema que nos podamos tomar con humor. Diez historias contadas de muy diferentes formas, por diez grandes autoras, acompañadas de los poemas de Peque Zurita, que me han gustado muchísimo.
Por decir algo de cada uno de ellos que os pueda invitar a la lectura, Mis alas es un canto de esperanza hacia la juventud. Deja que hablen nos hace evocar los secretos que guardan nuestros mayores, algunos inconfesables. Cartas al señor Smith, ese diario tan particular buscando al verdadero señor Smith, si es que existe. Un par de alianzas es la explosión del amor. La niña de las peinetas, el alzheimer, la vejez, las hijas que se convierten en cuidadoras enterrando su propia vida. Nido de arañas describe como una simple frase puede cambiar la visión que tenemos de una persona, la falsedad del ser humano. Cómo acabar con el amor, la dureza del aborto. Querida Sara, una carta escrita por nuestro otro yo, el que piensa y reconoce los errores, los miedos, los peligros. Ni un minuto más es lo que hay detrás de las noticias que, cada día, leemos en el periódico. Mar de esperanza, volver a nacer, una y otra vez, todas las veces que sea necesario, con la ayuda de gente buena.

Me ha gustado muchísimo.

Todos los beneficios recaudados irán destinados a la Asociación MUM, mujeres unidas contra el maltrato, que trabaja con víctimas de violencia de género en programas de apoyo, educación y prevención. 

Reseña original publicada en el blog de la Revista Pasar Página

miércoles, 10 de abril de 2019

Trampantojo: Mi opinión



Sinopsis:

En este mundo en el que vivimos, regido por la imagen que volcamos en las redes sociales, todos sabemos que los demás ocultan más de lo que muestran, que toda esa profundidad no es más que un trampantojo que quiere figurar lo que no es. ¿Cuántas veces nos hemos preguntado qué es lo que en realidad piensa esa persona que tenemos más cerca, la que más nos importa? ¿Cuántos de nosotros seríamos capaces de resistir la tentación de echar un ojo a su correo, a su móvil, a sus chats personales y, si lo tuviera, a su diario? En esa tentación cae Andrea. Pero lo que ella no espera es que, una vez abierta esa puerta, toda su realidad se derrumbe y altere la vida de todos los que la rodean. Marina Lomar, en su primera novela publicada, nos hace un relato fiel de la sociedad actual, del mundo en el que se mueven sus personajes, reales, cotidianos, tan cercanos que parece que los conocemos de toda la vida. Con una prosa elegante, fluida y enormemente rica, nos lleva de la mano con delicadeza en una espiral de sentimientos y de emociones reales y cercanas. Y, a la vez, profundos. Ángeles Pavía

Mi opinión:

Cuando Marina Lomar me preguntó si quería leer el manuscrito de Trampantojo, me sentí especial, como siempre que me invitan a compartir un trabajo antes de ponerlo en manos de los lectores. No es algo que haga habitualmente, solo cuatro amigos, antes que Marina, habían confiado en mi criterio como lectora, previo a la publicación.
Me envió un PDF con las 186 páginas de Trampantojo y dejé la lectura que tenía entre manos para abrir esta novela, sin tener mucha idea de a qué me iba a enfrentar, ya que ni la sinopsis ni la portada, me habían sacado de dudas y el título, a pesar de gustarme muchísimo, tampoco me daba demasiadas pistas.
Quedé atrapada desde la primera página con esa madre, leyendo a escondidas la llamada de socorro que su hija había escrito en un diario. A partir de ahí no leí, devoré, tanto, que he tenido que releer para poder «sacarle el jugo» a esta preciosa historia.
Cuando cierras la última página hace rato que ya tienes claro el porqué del título. Trampantojo: trampa con que se engaña a una persona haciéndole creer que ve algo distinto a lo que en realidad ve. Porque todos nos hemos puesto alguna vez un trampantojo que no permita ver quiénes somos realmente, los miedos que escondemos, los secretos inconfesables, las fobias, los celos, las mentiras…

En esta novela intimista, Marina Lomar quita ese trampantojo a un grupo de mujeres, Andrea, Gisela, Carla, Paula, Elda y Mara, nos describe su vida y sus sentimientos, nos muestra cómo son realmente.
El planteamiento inicial es el hilo conductor para unir todas las historias: el dilema de una madre que quiere ayudar a su hija pero para ello tiene que reconocer que ha cruzado esa línea que nunca se debe cruzar: respetar la intimidad de los hijos. Un dilema que seguro que, los que sois padres, habéis tenido alguna vez.

Uno de los puntos fuertes de esta novela es que nos vamos a ver reflejados en uno o varios de los personajes, sobre todo si miramos en nuestro interior y nos quitamos nuestro trampantojo. La autora nos muestra, en poquísimas páginas, la sociedad actual, las relaciones con maridos, ex maridos, amantes, pretendientes, padres e hijos y, por encima de todo, la amistad que actúa como bálsamo en este mundo complicado.

La sencilla portada nos invita a que abramos un libro que no nos va a dejar indiferentes, nos va a hacer reflexionar y nos dejará un poso difícil de olvidar.

Muy, muy recomendable.