jueves, 7 de enero de 2016

Matar al mensajero: Mi opinión.


La primera vez que me encontré con Mercedes Gallego, no conocía su obra, pero me cayó bien.

Ella estaba recién llegada a Madrid e intentaba iniciar una nueva vida, una nueva novela y hacer nuevas amistades.

Enseguida compré su última publicación, “El asesino del Ajedrez”, que me pareció muy buena.

Después leí “Operación Maletín” y “La trampa”, ambas de la colección “Candela Luque”. La primera me decepcionó y la segunda me gustó bastante, aunque “El asesino del ajedrez” había dejado el listón demasiado alto.

Durante todo este tiempo, he conocido a la Mercedes persona, hemos compartido presentaciones de libros, club de lecturas, charlas por facebook, alguna merienda, una cena de Navidad y su 70 cumpleaños.

Es una mujer cercana, muy independiente. Me encanta escucharla por el conocimiento que demuestra de temas muy variados. Está siempre dispuesta a ayudar, sobre todo, a sus compañeros de profesión.

En una de esas conversaciones me comentó que me faltaba por leer la mejor: “Matar al mensajero” y que las había leído desordenadas ya que, si bien son historias independientes, el personaje protagonista, Candela, va evolucionando en el orden en el que fueron escritas.

Y esta ha sido mi última lectura, a caballo entre 2015 y 2016: “Matar al mensajero”

Me ha enganchado desde la primera página y, además, me ha llenado mucho su lectura porque me ha introducido en un ambiente desconocido para mí y sobre el que no había leído nada: El lesbianismo.


Sinopsis:

Por segunda vez la protagonista de la serie, Candela Luque, deberá investigar la muerte de una mujer de su misma edad, pero esta vez dentro de un colectivo marginado por la sociedad de la época: era lesbiana y serlo en la España de 1976 era lo mismo que ser delincuente.

La droga y la prostitución también rodean a esa muerte que, poco a poco, se cobrará otras víctimas. También la alta burguesía muestra su verdadero rostro de hipocresía y falsa moral en una sociedad que condena el amor entre mujeres y protege una casa de citas en la que los hombres adinerados buscan compañía. Esta novela está ambientada en un pub que existió en Barcelona en los años 70 y 80, pero se le ha cambiado el nombre. Muchas reconocerán en él aquel lugar que fue un reducto de libertad, cuando no existía, para muchas mujeres.


Mi opinión:

Pongamos en una ensaladera un asesinato, una policía que no duda en adentrarse en un ambiente que no es el suyo para averiguar la verdad, acompañada de un músico aficionado que tiene que trabajar en la policía para subsistir y de una abogada comunista en la clandestinidad, aderecémoslo con un ambiente sórdido en el que ser homosexual es un crimen y más si eres mujer, un cuerpo de policía enfrentado entre lo que han estado acostumbrados a hacer durante demasiados años y lo que ahora se les pretende exigir, añadamos unas gotas de falsa moral y tendremos como resultado una novela magnífica que merece la pena ser leída.

2 comentarios:

  1. ¡Gracias! Eso se llma empezar el año con buen pie, porque eres una gran lectora y que te haya gustado esta novela es una gran alegría.
    De momento estás al día con mis novelas, pero será por poco tiempo.
    Gracias, superabuela, eres una gran persona

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