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26 de octubre de 2018 |
El día amaneció gris, había llovido durante la
mañana, pero el tiempo no nos iba a quitar la ilusión que habíamos puesto en
esta presentación. Cada uno había tenido que hacer sus particulares
malabarismos para poder tener libre desde la hora de la comida hasta que,
después de cenar, llegase la despedida.
Habíamos quedado directamente en El dinosaurio todavía estaba allí, lugar
elegido para la presentación, con el fin de dejar todo preparado para por la
tarde, ya que sabíamos que abrirían con la hora muy justa.
Allí esperamos la llegada de Pilar, la anfitriona, que en esta ocasión venía acompañada de su
marido, al que no es muy fácil ver en este tipo de eventos.
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Noviembre 2017 «Un café a las seis» |
Había transcurrido un año desde que nos reunimos
aquí mismo para la presentación de Un
café a las seis, a la que Víctor Fernández Correas no podía asistir pero le dio a Pilar la sorpresa de comer con nosotros.
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Pilar Muñoz y Víctor Fernández Correas |
En esta ocasión no pudo acompañarnos, pero vendría
más tarde ya que sería quien acompañase a Pilar en la puesta de largo de Aquello que fuimos.
La comida transcurrió entre risas y complicidad.
Se disfruta mucho cuando se puede compartir físicamente con amigos con los que
acostumbras a «dialogar» a través del teléfono o el ordenador.
Como la lluvia nos había dado una tregua,
decidimos visitar, al igual que hace un año, la Feria del Libro que acababa de
inaugurarse en la Plaza Mayor. Dimos un paseo agradable y decidimos tomar un
café en algún hotel de la calle Atocha, ya que el tiempo no estaba para
sentarnos en una terraza.
Pero la realidad es que no nos servía cualquier
hotel, yo quería que fuésemos a uno en particular, ese en el que nos esperaba
María José Moreno, recién llegada desde Córdoba en el AVE y que era la sorpresa
que le teníamos preparada a Pilar y a Mayte.
A estas alturas tuve que buscar un cómplice porque no entendían que tuviésemos que caminar tanto para
tomarnos un café.
El reencuentro fue emotivo para todos, unos porque no la esperaban y otros porque no la veíamos desde hacía
tiempo.
Ahora sí nos tomamos ese esperado café y nos
reímos con las anécdotas de unos y otros.
El tiempo pasó volando y en la puerta del Dinosaurio ya había gente esperando
para entrar.
Desde ese momento MariPili se convirtió en la
escritora Pilar Muñoz intentando agradar y saludar a todos aquellos que habían
decidido ocupar su tiempo en un viernes lluvioso y con un Madrid colapsado de
tráfico, para acompañarla.
La presentación fue todo un éxito, pero eso ya lo
contaré en otra entrada.
A la salida, después de despedir a los numerosos
asistentes, iniciamos un paseo despacio, comentando todo lo que habíamos vivido
y terminamos cenando unas tapas en la Plaza de Benavente.
Nuestra cita había llegado a su fin, cada uno de vuelta a su casa, a su hotel...Mercedes Gallego, que se unió a nuestro grupo y María José Moreno se
perdieron caminando por la calle de Atocha, dos grandes escritoras del brazo.
Y yo me traje el recuerdo de un día inolvidable
que ahora me apetece compartir.
Esos momentos bonitos que vivimos gracias a
decisiones aparentemente intrascendentes, esas decisiones de las que habla
Pilar Muñoz en «Aquello que fuimos»
(Reseña pinchando en la foto)