jueves, 19 de marzo de 2020

A mi padre-2020


Querido papá:

Un año más, y van dieciséis, te felicito por carta con la ilusión y la esperanza de que llegue a tu estrella.

No te puedes ni imaginar el día de San José tan extraño, por decirlo de alguna forma, que estamos pasando.

En Madrid, este año no es festivo, y nosotros habíamos pensado celebrarlo con los chicos el próximo fin de semana. Tu yerno había decidido que mejor una merienda que una comida, porque son días en los que hay mucha gente en todos los sitios y resulta agobiante salir a comer fuera. Pues nada, ni comida ni merienda ni nada, estamos en estado de alarma, sin poder salir de casa y las calles de Madrid están vacías. ¿Cómo te quedas? Me imagino, de piedra. Pues así estamos todos, pensando que lo de que la realidad siempre supera a la ficción, no podía ser nunca tan impresionante como esto que nos está ocurriendo.

Todo empezó en un mercado en Wuhan, China… como lo estás leyendo, en China. Tres meses después, hay contagios en todo el mundo y, en Madrid, estamos pasando por una situación complicada, somos los que más casos sumamos en toda España. Se está muriendo mucha gente, más los mayores, como pasa siempre que hay una enfermedad grave.

Todas las noches, a las ocho en punto, salimos a aplaudir a nuestros sanitarios, que están dando todo, pero el aplauso se extiende a todos esos que, cada día, nos hacen la vida más sencilla, los policías, los que nos facilitan los artículos de primera necesidad, como la comida o la farmacia, los barrenderos y tantos otros que están trabajando para nosotros en estos tiempos difíciles.

Esta crisis ha conseguido una cadena de solidaridad, inimaginable hace unos días, con la que intentamos ayudar, cada uno en lo que podemos, a los que lo necesitan.

No es fácil, papá. Sabes que yo soy muy besucona, muy zalamera, muy cariñosa y solo puedo ver a mis hijos y a mis nietos a través de las video-llamadas. Es lo que más añoro, más que salir a la calle o hacer otro tipo de actividades, añoro los besos y abrazos de los míos, las risas de las niñas…

¿Qué más te puede decir? Intento no estar triste, hago rutinas para tener cubierto todo el tiempo y me he hecho la firme promesa de no discutir con Juancar, que también lo está pasando mal, pero hay veces que la cabeza no obedece y el corazón llora.

Llegará el día en el que nos podamos reunir todos, besarnos y abrazarnos. Las ausencias, las añoranzas, las risas y las lágrimas no compartidas, podrán quedar en el olvido, pero hasta entonces, nos tendremos que conformar con recordar lo vivido, igual que recuerdo los momentos maravillosos que he vivido a tu lado.

Ya te contaré como salimos de esta, espero que bien.

FELICIDADES, papá.

3 comentarios:

  1. ������������estos aplausos van para tí ��todosaldrabien

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  2. Me encanta ,son mis sentimientos,mi mayor pena es no poder estar ,abrazar,y besar a mis niños.Sólo deseo q pasé cuanto antes todo y q salgamos bien parados de todo esto y podamos disfrutar del verano y de los nuestros .Un besazo.

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  3. Llegará el día Almudena. Renaceremos, eso sí, con heridas que tardarán en cerrar. Pero lo vamos a conseguir. 1000 besos. Cuánto me alegra haberte encontrado por este Madrid tan nuestro, tan raro ahora, pero que pronto volverá a oler a bocadillo de calamares y a churros.

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